Rebeldes sirios y unidades de la organización terrorista chií Hezbollah entraron en combate en territorio libanés, en un claro signo de que la guerra civil siria se ha desbordado a los países vecinos.
Según el portal de internet de noticias El Nashra, catorce rebeldes sirios y un miembro de Hezbollah murieron en el enfrentamiento.
El canal de televisión Al Mayadeen, afiliado a Hezbollah, y partidario del régimen sirio, afirmó que 17 combatientes del frente Jabhat al Nusra, un grupo radical rebelde vinculado a la red terrorista Al Qaeda murieron, cuando trataban de emplazar lanzadoras de cohetes en el este de la región de Baalbek, un feudo de Hezbollah, cerca de la frontera con Siria.
Aparentemente, las fuerzas de Hezbollah rodearon
Según el portal de internet de noticias El Nashra, catorce rebeldes sirios y un miembro de Hezbollah murieron en el enfrentamiento.
El canal de televisión Al Mayadeen, afiliado a Hezbollah, y partidario del régimen sirio, afirmó que 17 combatientes del frente Jabhat al Nusra, un grupo radical rebelde vinculado a la red terrorista Al Qaeda murieron, cuando trataban de emplazar lanzadoras de cohetes en el este de la región de Baalbek, un feudo de Hezbollah, cerca de la frontera con Siria.
Aparentemente, las fuerzas de Hezbollah rodearon
y emboscaron a un grupo de rebeldes sirios y a sus aliados libaneses, sospechosos de haber lanzado cohetes contra Baalbek el día anterior, según un oficial de seguridad.
Un día antes, dieciocho cohetes y proyectiles de mortero cayeron en la zona de Baalbek sin provocar víctimas.
La creciente tensión entre Hezbollah y los rebeldes que están tratando de derrocar al presidente Bashar Assad está vinculada a la ofensiva del régimen contra la ciudad de Al Qusair. La intervención de Hezbollah en la batalla por el control de la estratégica ciudad ha dejado expuesto el creciente rol de esa organización en el conflicto, impulsando a los insurgentes a amenazar con atacar las bases del grupo chií en el Líbano.
Un día antes, dieciocho cohetes y proyectiles de mortero cayeron en la zona de Baalbek sin provocar víctimas.
La creciente tensión entre Hezbollah y los rebeldes que están tratando de derrocar al presidente Bashar Assad está vinculada a la ofensiva del régimen contra la ciudad de Al Qusair. La intervención de Hezbollah en la batalla por el control de la estratégica ciudad ha dejado expuesto el creciente rol de esa organización en el conflicto, impulsando a los insurgentes a amenazar con atacar las bases del grupo chií en el Líbano.
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