El Ministro de Exteriores, Avigdor Lieberman, dijo a los ministros de Exteriores de España y Francia, que "resuelvan primero sus propios problemas en Europa antes de venir a nosotros con quejas. Tal vez entonces aceptaremos sus sugerencias", señaló mientras cenaba con ellos.Lieberman subrayó a Bernard Kouchner y a Miguel Ángel Moratinos (este último en la foto con Lieberman) que "Israel no será la Checoslovaquia de 2010", en el encuentro que tuvo lugar en las oficinas del Ministerio de Relaciones Exteriores en Jerusalén.
Lieberman denunció que la comunidad internacional está tratando de compensar su fracaso en Afganistán, en Sudán y en Corea del Norte tratando de forzar a un acuerdo entre Israel y los palestinos en un año.
"Sería mejor que hablaran con la Liga Árabe sobre lo que pasará en Irak en 2012, donde probablemente se producirá una explosión como en el 2000, en lugar de venir a presionar a Israel ", advirtió Lieberman.
El canciller expresó que no espera que la Unión Europea resuelva todos los problemas del mundo, pero que sí espera que por lo menos solucione los problemas dentro del continente europeo, como la crisis de Kosovo y el conflicto de Chipre.
"En 1938, para aplacar a Hitler, Europa sacrificó a Checoslovaquia en lugar de apoyarla, y no ganó nada de él", apuntó Lieberman. "No vamos a ser la Checoslovaquia de 2010, vamos a defender los intereses vitales de Israel", aseguró el ministro de Exteriores.
Con la desintegración del imperio Austrohúngaro, en 1918, la región montañosa y fácilmente defendible de los Sudetes fue incorporada a Checoslovaquia (dividida pacíficamente en 1993 en dos países: la República Checa y Eslovaquia), sin consultar con un referéndum a sus habitantes, que eran étnicamente alemanes. En 1938, Hitler anexó la región a Alemania, con el consentimiento de Gran Bretaña y Francia. Un año después, Alemania conquistó el resto de Checoslovaquia. Luego, centró su atención en Polonia
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